Jordi Ribas pertenece a la cuarta generación de una familia de carpinteros, es conocedor del oficio, de las técnicas y los materiales tradicionales.
En 1996 trasladó su pequeño taller a la Colònia de Sant Pere, Mallorca, y desde entonces ha ido buscando una alternativa a la relación del hombre actual con la madera y con el trabajo en general.
Su trabajo es una forma de investigación constante.
Los muebles y objetos que hace los diseña junto con las personas que los van a utilizar y convivirán con ellos. En el proceso se tiene en cuenta la funcionalidad, la armonía con el entorno, las materias primas idóneas y respetuosas con el medio ambiente, la personalidad del destinatario…
El objetivo es crear objetos de alta calidad, originales, duraderos y con una esencia que les confiera un valor también emocional.